7 tips de decoración para habitaciones pequeñas
7 Tips de decoración para habitaciones pequeñas
En Alelu te damos ideas para convertir la decoración de los interiores de tu casa y pasar de una habitación pequeña a un dormitorio que parezca más grande. No se trata solo de cambiar la pintura de las paredes a un color blanco. De hecho, ese no es un factor imprescindible para que una habitación parezca mayor. El truco está en elegir y combinar bien las proporciones de los muebles y en seleccionar las formas que sean más adecuadas para el espacio que ocupa esa habitación. Podes tener un dormitorio increíble, aunque sea pequeño. No tiene que ser aburrido y no tiene por qué ser blanco. Aprovechá al máximo el espacio que tenés, ¡y divertite!
1. Elegí una cama y un colchón bajos
Puede parecer que, cuando hablamos de dormitorios pequeños, la mejor opción sea una cama pequeña. Pero, lo realmente importante es que sea una cama baja. Cuando se trata de habitaciones pequeñas, la clave es pensar en la altura de la cama y en la altura del colchón. Y no temas a la hora de poner un respaldo, tu habitación no se verá más pequeña porque añadas un respaldo a la cama.
2. Colores para habitaciones pequeñas
- Apostá por los blancos, cremas, amarillo, piedras. Los tonos pastel como el verde, rosa o lila son tonalidades suaves y poco estridentes.
- Si querés crear un espacio continuo, elegí el mismo color para las paredes y para el techo.
- Para dar más altura al dormitorio pintá el techo en un color más claro.
- Añadí a la habitación un acento de color para aportar carácter y personalidad a la decoración.
- Los estampados pueden cargar un poco el ambiente, añadilos en pequeñas dosis.
- Para dar profundidad a un dormitorio pequeño pintá una pared en un tono oscuro, pero sólo una. Es una forma de darle mayor protagonismo y personalizar el espacio.
- El color en el mobiliario también es importante. Tratá siempre de optar por muebles en tonos claros.
3. Escoge un único punto focal
Cada habitación necesita un punto focal. Aquel elemento de diseño que captura tu ojo en el momento en que entras en la habitación. Puede ser una lámpara o bien un elemento de color (el flúor podría ser una buena opción). Todas las habitaciones (living, comedor...) necesitan un punto focal, pero en el caso del dormitorio es aún más relevante al tratarse de un espacio más estrecho.
4. Elegí entre respaldo o cuadro
Si optás por una cama con respaldo, olvidate de poner cuadros en la habitación; es demasiada información. Todo gira alrededor de la idea de no sentirte abrumado cuando entras en el dormitorio; al fin y al cabo, es un lugar donde relajarse... Si respaldo y añadís un cuadro en la misma pared, vas a hacer que esta se perciba demasiado pesada. Si, por el contrario, tenés una habitación con una cama "ligera", un cuadro se puede convertir en la mejor opción, actuando, incluso, de improvisado respaldo.
5. La mesita de luz que mejor le sienta
Las mesitas de luz deben acompañar la cama, nunca dominarla. Una buena opción es una mesita de luz redonda o bien un pequeño banco. Y si tiene la misma textura que las patas de la cama, mejor que mejor. La mesita de luz es un elemento secundario, pero asegurate de que no es ni demasiado endeble ni demasiado pequeña porque, en ese caso, puede parecer una disculpa.
6. Dos o tres objetos máximo
En una habitación pequeña es conveniente mantener el orden, por eso te recomendamos que no tengas más de dos o tres objetos en la mesita de luz. Es preferible tener dos o tres piezas grandes que muchas pequeñas. Una lámpara, el libro que estés leyendo y una caja para las joyas. El resto (marcos de fotos, recuerdos de viajes...) es mejor llevarlos a un lugar más espacioso.
7. Ropa de cama sofisticada pero discreta
Las habitaciones pequeñas requieren menos ropa de cama. En un espacio de dimensiones reducidas, una cama repleta de almohadas dará sensación de pesadez. En lugar de crear un lugar sereno y armónico, estarás propiciando un ambiente sofocante. Considera algo relajante pero lujoso, en tonos pastel y/o estampados suaves.